Hoy repetí mercadillo en el pueblo vecino del norte de Portugal, en Vilanova de Cerveira.
Pueblo pequeño en la orilla del Río Miño y con mucha historia que pasear y disfrutar.
Éramos muchos los que tuvimos la misma idea y era difícil caminar y hacerse un hueco para revolver en los puestos de ropa, de flores, de semillas y esquejes para plantar de verduras y demás cosas. Mucho calor y muchas cosas que ver y comprar si se terciaba.
Sólo hice un par de fotos, pero me "pillaron" rebuscando en un puesto de puntillas de muchos colores y variadas a precio irresistible.
Seguro que has disfrutado de lo lindo. BESICOS.
ResponderEliminarImagino que lo pasarías estupendamente.
ResponderEliminarBesitos